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¿Y AHORA CÓMO NOS MOVEMOS?

Llegaste al destino con niños, maletas y ganas de aventura… pero ahora viene la gran pregunta: ¿cómo nos movemos sin enloquecer? No te preocupes, aquí tienes una guía rápida para elegir el mejor transporte una vez que aterrizas en tu nuevo rincón del mundo. ¡Para que todo sea más fácil y hasta divertido!

🚗 Alquiler de coche: libertad total (y siesta asegurada para los peques)

Si quieres moverte a tu ritmo, hacer paradas improvisadas y evitar horarios de transporte público, alquilar un coche es una gran opción.

  • Reserva con antelación: Así te aseguras mejores precios y disponibilidad.
  • Elige un coche amplio: Con niños, el espacio extra nunca sobra.
  • Sillita infantil: No olvides incluirla al hacer la reserva (algunas empresas la alquilan, pero puede salir más económico llevar la propia. Incluso en el avión te dejan facturarla de manera gratuita).
  • Revisa bien el seguro: Que cubra lo esencial para evitar sustos.

¡Súper truco! Con DentalCars encuentras coches de alquiler a buen precio y sin sorpresas ocultas. Además, tienen opciones en muchos aeropuertos y ciudades, así que puedes recoger el coche justo al aterrizar. ¡Menos esperas, más viaje! 

🚕 Taxi y VTC: para cuando el cansancio gana la partida

Después de un vuelo largo o si tienes prisa por llegar al hotel, lo mejor es ir directo en taxi o VTC (tipo Uber, Bolt, Cabify, etc.).

🔸 Pregunta por tarifas fijas: Algunos aeropuertos tienen tarifas cerradas al centro.
🔸 Verifica la app local: Dependiendo del país, puede haber una app específica más económica que Uber.
🔸 Taxis con silla infantil: En algunas ciudades hay servicios especiales, aunque a veces toca llevar la propia.

Truco extra: Enséñales a los niños cómo pedir un taxi levantando la mano (¡les encantará sentirse viajeros expertos! ).

🚌 Transporte público: el más barato y con toque aventurero

Si te gusta la inmersión total en la cultura local, el transporte público es una experiencia en sí misma.

🔸 Tarjetas de transporte: Muchas ciudades tienen pases ilimitados que ahorran dinero y evitan comprar billetes sueltos.
🔸 App de mapas: Usa Google Maps o Moovit para ver rutas en tiempo real.
🔸 Hora valle = menos caos: Evita la hora punta si viajas con carrito o niños pequeños.

Truco extra: Haz que los niños sean los “navegantes oficiales” del metro o bus, señalando en qué estación deben bajarse. ¡Así se sienten parte del viaje!

🚲 Bicis y patinetes: diversión sobre ruedas

Si la ciudad es amigable con ciclistas, alquilar bicis o patinetes eléctricos puede ser una forma rápida y divertida de moverse.

🔸 Bicis familiares: En muchas ciudades hay bicis con asiento para niños o incluso “cargo bikes” para llevarlos cómodos.
🔸 Carriles bici seguros: Antes de lanzarte a la aventura, revisa que haya rutas seguras.
🔸Patinetes solo para distancias cortas: No es la mejor opción si tienes que cargar mochilas, pero para pequeños trayectos puede ser útil.

Truco extra: Convierte el paseo en una carrera divertida (sin olvidarse de las normas de tráfico, claro ).

⛴️ Ferries y barcos: ¡la ruta más emocionante!

Si tu destino tiene costa, ríos o lagos, moverse en barco puede ser una experiencia inolvidable.

🔸 Ferries urbanos: En ciudades como Estambul, Venecia o Lisboa son parte del transporte público.
🔸Excursiones en barco: A veces los barcos turísticos también sirven como transporte entre islas o zonas costeras.
🔸 Revisión del clima: Evita días de mucho viento si los niños se marean con facilidad.

Truco extra: ¡Conviértelo en una misión pirata! Deja que los niños “busquen islas” o jueguen a ser marineros.

Elige lo que mejor se adapte a tu familia

Cada viaje es diferente, así que el transporte perfecto dependerá de la ciudad, el tipo de viaje y la edad de tus hijos. Pero lo más importante es disfrutar del trayecto tanto como del destino.

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